Este hotel, emplazado en un edificio moderno de arquitectura colonial, está ubicado a tan sólo una calle de la playa.
Conserva a la perfección el sentimiento de estar en tu casa, ya que posee únicamente cinco habitaciones atractivas con vista al mar, las cuales cuentan con aire acondicionado, ventiladores de techo, camas King size con colchones muy cómodos, dos sillones y una mesa con dos sillas. Hay frigobar, cafetera y garrafón de agua. Además tiene una terraza con hamaca para relajarse con la refrescante brisa del mar.
El baño, con acabados 100% mexicanos, es de una exquisita belleza. Y sus amenidades son hechas con productos biodegradables y de la zona.
Es un lugar ideal para distenderse, estudiar, y tomar clases. Todas sus instalaciones cuentan con Wi-Fi gratis.
Cada día se sirve el desayuno de 8:00 a 9:00 horas, cuyo menú incluye huevos, sándwiches y frutas con una exquisita granola casera, por un precio accesible, en un amplio comedor decorado con muebles rústicos y de mucha comodidad.
A este hotel le agregan una cuota de especialidad sus anfitriones, Catriona Brown, nacida en Australia, quien llegó a este destino en el 2002 a pasar un par de días de relajación, y sintió que Puerto Morelos era la ciudad para ella y decidió quedarse. Ella está siempre dispuesta a compartir su hogar con los que tienen un corazón abierto y es una excelente consejera a la hora de las preguntas de los visitantes. Y Liz, proveniente de Carolina del Sur, siempre con una gran sonrisa y excelente disposición de ayudar a cada una de las personas que se acerquen a CASA CARIBE, ya sea para hospedarse o para comprar en su maravillosa tienda.
La tienda de este acogedor hotel posee todo tipo de objetos para comprar, desde un bonito recuerdo, una artesanía, hasta un buen molcajete que te servirá para hacer alguna de las deliciosas recetas que te enseñarán si decides tomar las clases de cocina. Las mismas comienzan a las 10 de la mañana y terminan con un exquisita comida a las 15 horas, preparada por cada uno de los integrantes que haya participado en el curso. Con instalaciones impecables, y bien adaptadas, el chef va explicando cómo hacer desde un guacamole hasta la complejidad de las salsas y los salbutes típicos de Yucatán.